Esta ESPECIE INVASORA, sin duda provocada por la compra en tiendas de animales ejemplares para regalar a los niños, que cuando se aburren, son liberadas en nuestros espacios naturales, debido a su mayor agresividad con respecto a la población autóctona del galápago leproso, está ocupando su sitio en muchas cuencas fluviales. Se da el caso, por ejemplo, que el Guadiana, casi a perdido a toda su población autóctona.
El mecanismo para deshacerse de estos animales es acudir a entregarlos a cualquier centro de protección de la naturaleza. En el caso de nuestra zona se pueden entregar al personal de la Charca de Suarez por ejemplo, ellos sabrán darle el tratamiento adecuado. Todo menos la liberación en humedales de la zona.
Detectado y, como veis fotografiado, en el cauce del Guadalfeo y veneros y balates adyacentes, por suerte aún no frecuentes, lo que nos da esperanza de que, con avisos como este y otros, podremos influir en evitar esa dañina práctica.
Galápago de Florida (Wikipedia)